A tí, que besas con toda el alma y muy poco cuerpo, entregué mi pasión desde pequeño. Consagraste mi fuerza y mi poder en la esencia de las batallas que desde entonces libro durante ciertos días, y que por lo menos siempre he ganado, aunque a veces sea por margen muy breve y a costo de dolores y golpes. Pese a todo, siempre está mi roja máscara y mis trémulas piernas agitándose frente a tu némesis, a quien necesito para vivir. Pero sabemos que tú eres mi pasión, mi deseo más inaudito e irreconocible. Te disfrazas y te vuelves blanca, gris, azul, morada, transparente. Yo siempre te reconozco y sonrío con dolorida expresión. Me cargas en tus brazos y te recito letanías muy breves usando mis castañuelas blancas.
De repente me canso y entro en recogimiento, retiro tu aliento de mi piel y mis entrañas. Es que una relación tan estrecha puede dejarme tan lleno de ti, que deje de ser yo, y al no ser yo ya no pueda adorarte con mi ser, que por lo visto es lo único que tengo, aparte de mi amor. A pesar de mis anhelos más nocturnos y más aislados, no me incrustaré para siempre en ti hasta que llegue el momento que ignoro y que secretamente ansío, pero voluntariamente contengo; pues sólo te disfruto como tú me disfrutas: cómo una paleta o un trago de agua, cómo una caricia venenosa en mi cuello.
3 comentarios:
que artishta
donde puedo hallar esa diosa
concede milagros? o solo puros sacrificios?
Viene desde el norte, aunque a veces desde el sur.
En mi caso concreto es el norte.
El sacrificio es el milagro.
Atte: el artishhhta (esperen exposición conceptual)
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